¿PERTENECE EL PERSONAL DE SALUD EN MÉXICO A LA NUEVA CLASE PRECARIA?
Resumen
PATRICIA ARISTIZABAL, DE LA FACULTAD DE ESTUDIOS SUPERIORES (FES) IZTACALA, Y GUSTAVO NIGENDA, DE LA FACULTAD DE ENFERMERÍA Y OBSTETRICIA (FENO), EN ESTA COLABORACIÓN CONJUNTA, ENFATIZAN LA SITUACIÓN DEL PERSONAL DE SALUD, QUE TEÓRICAMENTE, POR PERTENECER AL MERCADO DE TRABAJO ESPECIALIZADOS, TENDRÍA QUE CONTAR CON MAYOR PROTECCIÓN A LOS EMPLEADOS, Y VALORAR SUS CAPACIDADES. SIN EMBARGO, DURANTE LA PANDEMIA SE OBSERVÓ EN EL ÁMBITO LABORAL DE ESTOS PROFESIONALES UNA FIEL REPRESENTACIÓN DE LA DESCRIPCIÓN DE GUY STANDING, RECONOCIDO ECONOMISTA INGLÉS, QUE INTRODUJO EL TÉRMINO THE PRECARIAT, UNA NUEVA CLASE SOCIAL GLOBAL CARACTERIZADA POR TRABAJOS INESTABLES, INGRESOS BAJOS E IMPREDECIBLES Y PÉRDIDA DE DERECHOS LABORALES. DURANTE LA PANDEMIA, EN MÉXICO SE OPTÓ POR LA CONTRATACIÓN DE PERSONAL RECIÉN EGRESADO Y DE ESTUDIANTES EN FORMACIÓN. QUIENES NO ESTABAN ACTIVOS LABORALMENTE, ENCONTRARON UNA OPORTUNIDAD COYUNTURAL PARA INSERTARSE AL MERCADO. NO OBSTANTE, LAS FORMAS EN LAS QUE ESTOS PROFESIONALES FUERON CONTRATADOS NO RESULTARON ADECUADAS. SE OBSERVÓ UNA MASIFICACIÓN DE CONTRATOS EVENTUALES DE MUY CORTA DURACIÓN; RELACIONES LABORALES FRÁGILES QUE INCLUYERON ACUERDOS DE PALABRA, SALARIOS COMPACTADOS CON AUSENCIA DE BENEFICIOS COMO VACACIONES, PRIMAS Y SERVICIOS DE SALUD, ENTRE OTROS. LA PRECARIEDAD LABORAL ESTÁ ESTRECHAMENTE RELACIONADA CON LA CONTRATACIÓN FLEXIBLE, LA CUAL, EN ALGUNOS CONTEXTOS, SE HA JUSTIFICADO COMO UNA NECESIDAD PARA MANTENER LA COMPETITIVIDAD DE LAS EMPRESAS. EN EL CASO PARTICULAR DE LA PANDEMIA, LAS EXTENSAS JORNADAS LABORALES Y LA TENSIÓN OCASIONADA POR LAS CONDICIONES DE RIESGO REFLEJARON UNA SITUACIÓN DIFERENCIADA QUE NO FUE FAVORECIDA POR LOS CONTRATOS FLEXIBLES. UNA DE LAS PREOCUPACIONES RADICA EN QUE DICHA FLEXIBILIZACIÓN CONTRACTUAL Y LA CONSECUENTE PRECARIEDAD AFECTAN TANTO LOS EMPLEOS PÚBLICOS COMO LOS PRIVADOS. ADEMÁS, CUESTIONAN LA FUNCIÓN DEL ESTADO COMO EMPLEADOR Y GARANTE DE DERECHOS LABORALES. A PRINCIPIOS DEL SIGLO, EN LA LUCHA POR ELEVAR SUS POSICIONES Y SALARIOS, SE INTEGRÓ LA DENOMINADA “PROMOCIÓN POR PROFESIONALIZACIÓN”, BUSCANDO AUMENTAR EL NIVEL DE ESTUDIOS TÉCNICOS A UNIVERSITARIOS E INCREMENTAR LA PERCEPCIÓN SALARIAL. UNA DÉCADA MÁS TARDE, CUANDO EL PERSONAL DE ENFERMERÍA QUE POSEE ESTUDIOS UNIVERSITARIOS O DE POSGRADO SE CONVIRTIÓ EN MAYORÍA RELATIVA EN EL SISTEMA DE SALUD, SE HA ENFRENTADO A NUEVAS FORMAS DE CONTRATACIÓN COMO LA OFERTA DEL PROGRAMA IMSS BIENESTAR, EL CUAL PROPONE SALARIOS FIJOS SIN POSIBILIDAD DE ASCENSO, MÁS BAJOS QUE LAS INSTITUCIONES HOMÓNIMAS Y SIN CLARIDAD EN LOS BENEFICIOS LABORALES. ANTE ESE HECHO, LA PREOCUPACIÓN DEL PERSONAL DE ENFERMERÍA HA SIDO VISIBLE. CADA AÑO EGRESAN ALREDEDOR DE 20,000 ESTUDIANTES DE ENFERMERÍA DE LAS UNIVERSIDADES, ES PROBABLE QUE UNA GRAN PROPORCIÓN DE ELLOS NO ENCUENTRE CONDICIONES ADECUADAS PARA INCORPORARSE AL MERCADO LABORAL. LOS DATOS APUNTAN A LA CRONICIDAD DE LA PRECARIEDAD LABORAL CON IMPLICACIONES EN LA SALUD MENTAL DE LOS TRABAJADORES, DEBIDO A LA INCERTIDUMBRE POR NO TENER UN FUTURO ECONÓMICO CERTERO Y A LA ANSIEDAD DE COMPETIR CONSTANTEMENTE POR ESPACIOS DE TRABAJO. AMBOS UNIVERSITARIOS SOSTIENEN QUE ÚNICAMENTE CON POLÍTICAS PÚBLICAS SENSIBLES ANTE EL CONJUNTO DE POTENCIALES CONSECUENCIAS NEGATIVAS DE LA PRECARIEDAD LABORAL, LAS DESIGUALDADES ACTUALES PODRÍAN SER CONTENIDAS Y DISMINUIDAS EN UN FUTURO CERCANO.